Pasó la primera fecha del año para Marcelo Teta. Gualeguaychú era el circuito donde el campeón 2020 de la TC 1100 esperaba con ansias y muchas ganas de estar entre los tres primeros de la carrera. Sin embargo la rotura del motor en las pruebas del viernes lo complicaron y el Reschini Competición lo tuvo que cambiar para encarar el resto del fin de semana. 

Con un segundo motor que no contó con el potencial necesario para estar a la altura de las circunstancias, el piloto de San Miguel se la rebuscó para terminar la serie y la final con lo justo viendo la bandera a cuadros en la quinta posición. Un resultado con sabor agridulce ya que en la previa Marcelo sabía que tenía la herramienta para estar entre los mejores tres de la competencia sin embargo pudo rescatar un quinto puesto que le permitió sumar los primeros puntos para defender la corona. 

De cara a la próxima fecha que será el 3 y 4 de Abril en La Plata, tanto él como el equipo están trabajando para hacer un motor nuevo que seguro, por cuestiones de tiempo, estará listo para la tercera fecha que será la de invitados en el mes de Mayo. 

“Terminamos la carrera con una sensación rara. Teníamos para estar entre los tres de punta pero la rotura del motor nos complicó. Por suerte el segundo motor se la bancó y pudimos rescatar un quinto puesto. Llegamos con lo justo a la bandera a cuadros con un auto que nos dejó sumar los primeros puntos en un campeonato que va a estar muy difícil defenderlo. Junto al Reschini Competición dejaremos todo para intentarlo”, analizó el campeón de la TC 1100. 

“Para La Plata iremos como terminamos en Gualeguaychú. El auto ya está todo desarmado y estamos haciendo el motor nuevo. Por cuestiones de tiempo no creo que lleguemos para el 4 de Abril. Haremos todo lo posible pero con seguridad estará listo para la carrera de invitados en la que estaré compartiendo el auto con Adrián Reschini”, cerró el piloto de San Miguel.