Leandro Elizalde volvió a la Clase Tres y fue referente dentro de la divisional con el Chevrolet Corsa que le entregó Fernando Monti y que motoriza Mauro Palma, conjunto que le permitió volver a los primeros planos y mostrarse muy rápido durante todo el fin de semana, dominando un entrenamiento, su grupo de clasificación y ganando su serie, aunque por muy poco no pudo coronar toda esa labor previa con un buen resultado en la competencia final, ya que a metros de la bandera a cuadros un toque con Nazareno Iglesias lo dejó sin chances de continuar detenerse en la leca de la horquilla con un neumático roto.

Todo ese trabajo fue sustentado por Fernando Monti, quien le entregó el auto con una base de la puesta a punto que de a poco se fue optimizando en cada salida a pista, siendo la referencia de los motores Fiat en cada grupo gracias a la gran labor de Mauro Palma, que puso ese producto entre los mejores de la divisional para que el piloto de El Palomar se luzca entre un gran lote de protagonistas que se encerraron en mínimas diferencias dentro de un trazado difícil como es el N°6 de Buenos Aires.

"Realmente estoy mas que conforme y feliz con lo hecho durante todo el fin de semana. Fuimos a divertirnos con todo el grupo, con el "tano" Gambale, con Fernando Monti y todos los que estuvieron presentes, logrando un funcionamiento increíble del auto en todos los aspectos, ya sea en el chasis con todo lo que se trabajó en el taller como con el motor que nos entregó Mauro Palma, sin dudas de lo mejor para pelear de igual a igual con los Audi. Fue todo mas que positivo, la clasificación, la serie ganada y todo lo que se pudo hacer en la final hasta ese toque con Iglesias que me rompió la goma y no se pudo seguir. Pasamos un gran fin de semana todos, fuimos protagonistas y sabemos que tenemos un gran auto, por eso les agradezco todo lo hecho y mas allá del resultado final me voy muy contento y analizando volver con algunos cambios porque la categoría está muy competitiva y no se puede dar ninguna ventaja" manifestó Elizalde, protagonista estelar de la numerosa y competitiva Clase Tres que pasó por Buenos Aires.