A poco más de una semana de un nuevo compromiso de A.L.M.A. Nueva Generación en el Autódromo “Oscar y Juan Gálvez” de la Ciudad de Buenos Aires, una de las novedades más importantes en la previa de la carrera es el retorno de Adolfo Fabricius de manera oficial a las pistas ante la ausencia por cuestiones personales de Christian Bispo.
El preparador de Pilar volverá a ponerse el buzo y casco de piloto para formar parte de la TC1600 con el auto propiedad de Bispo y que atiende su propia estructura, el Bocha Performance. Vale recordar que Fabricius ya corrió este año en la categoría pero como invitado en el Gran Premio que se desarrolló en el Autódromo de Concepción del Uruguay, Entre Ríos y en esta oportunidad será el encargado de manejar el Fiat 600 negro con el objetivo de ser protagonista y meterse entre los puestos de vanguardia.
“Cómo Christian Bispo no va a estar en el Gálvez por cuestiones personales y para que no tengamos un auto menos en la TC1600, se dio la oportunidad de correr con el auto de él así que estamos trabajando para acomodarlo a nuestro gusto y forma de manejo para ser competitivos”, comentó “El Bocha”.
“Veremos donde estamos parados con un auto que viene de conseguir muy buenos resultados en las últimas carreras de la mano de Bispo. Pegó un salto importante gracias al trabajo de todo el equipo por eso la idea es no desentonar y tratar de estar a la altura de las circunstancias”, cerró el preparador de Pilar que en el Coliseo Porteño volverá a subirse a un auto de carrera.
